Dear Brothers and Sisters in Christ,
After a year or so of political debates, we have the wonderful opportunity to wield the power of the pen and vote! It is a great blessing for us to be able to participate in the election process. Hopefully you know by now that this is a serious moment in our nations history. The future leadership in our country and in our state will impact many people.
This Tuesday we choose our president, senators, representatives - and a number of other officials. Our vote matters a great deal. There are issues that could deeply impact the way we life our Catholic faith. As with any big decision, we need to increase our prayers because this election could be a matter of life or death for millions of people. BUT as important as these elections are for our future, we face an even greater moment of decision. Now is your moment of decision AND IT WILL IMPACT your life here and in the hereafter.
The decision involved in voting is vital, but you and I face an even bigger decision. We face this decision not only when we fill out a ballot, but every day. The choice is this: to turn to God or away from him. Whatever happens on November 6, life will go on. But if a person turns from God, that choice means eternal death – separation from God and loved ones forever.
In Sacred Scripture, Moses tells us to fear God and keep his commandments. And then Jesus reminds us that the commandments involve our relationship to God and to each other.
As your pastor, I want to help you in your relationship with God. In this parish, we have something called "Stewardship." It means recognizing one's gifts, giving thanks and praise to God for them (especially at Mass) and asking Him how to use His gifts that He has so generously giving to us. Stewardship is another word for salvation. May we use our God given gifts as if our salvation depends on it… and let Our Lord take care of the rest.
God Bless,
Fr. Don Kline
Queridos Hermanos y Hermanas en Cristo,
¡Después de más o menos un año de debates políticos, tenemos la maravillosa oportunidad de tener el poder del lapicero y votar! Es una gran bendición para nosotros el poder participar en el proceso electoral. Espero que para ahora ya sepan que este es un momento serio para la historia de nuestra nación. El liderazgo futuro para nuestro país y de nuestro estado impactara a muchas personas.
Este Martes escogeremos a nuestro presidente, senadores, representantes—y un numero de otros oficiales. Nuestro voto vale mucho. Hay muchos temas que pueden impactar profundamente la manera de cómo vivimos nuestra fe Católica. Como con cualquier otra decisión grande, debemos de aumentar nuestras oraciones porque estas elecciones pueden ser una situación de vida o muerte para muchas personas. Estas elecciones son muy importantes para nuestro futuro, estamos enfrentando un gran momento de decisión. Ahora es el momento de decisión, E IMPACTARA su vida en este momento y en adelante.
La decisión de votar es vital, pero usted y yo enfrentamos una decisión aun más grande. Enfrentamos no solo la decisión de llenar la planilla de voto, sino una decisión de todos los días. La opción es esta: el seguir a Dios o alejarnos de EL. Sea lo que sea que pase el 6 de Noviembre, la vida continuara. Pero si una persona elije alejarse de Dios, esa opción significa la muerte eterna—y la separación completa de Dios y de sus seres queridos.
En las Sagradas Escrituras, Moisés nos dice que le temamos a Dios y que mantengamos sus mandamientos. Y después Jesús nos recuerda que los mandamientos envuelven nuestra relación con Dios y con los demás.
Como su párroco, yo les quiero ayudar con su relación con Dios. En esta parroquia, tenemos algo que se llama "Corresponsabilidad". Esto significa el reconocer los dones que se nos han dado, dándole gracias y alabanzas a Dios por esos dones (especialmente en la Misa) y pidiéndole a EL que nos ilumine de cómo usar esos dones que El mismo nos ha dado. La Corresponsabilidad es otra palabra para la salvación. Pidámosle a Dios que usemos los dones que El nos ha dado como si nuestra salvación dependiera de ello….y dejemos que Dios se encargue que de lo demás.
Que Dios los Bendiga,
Padre Don Kline