Happy September!
Many schools have resumed and the family routines are in full swing with sports and extracurricular activities. Here at St. Joan of Arc we have seen a steady and quiet month of August and we took this time as a staff to develop our leadership goals. One important reality that came to our team was that of family, a family of faith to be more specific.
As we look at our own families, we see joy and enthusiasm towards the faith. These simple and noisy sounds around the parish bring a happiness and childlike sense of belonging not only to the household family, but a family of believers in Jesus Christ. From what I witnessed, this place we call our home parish has many ages and when you stick around and talk to each other you will find so many core values among your parish family members.
The devotional and prayerful opportunities are present before, during, and after Mass. We have our perpetual adoration chapel and many prayers in the back of the Lumen Christi Missal to help prepare for Mass. We have regular hours of confession and religious education to receive the sacraments. All ages are considered and my hope is that no matter what state in life you are in you find your home parish as a place of healing, renewal, and growth.
As we gather together, remember to spread joy and mercy to our guests and visitors. Introduce yourself when you see a new face. You have so much to offer in your humble and believing heart. It is the Lord who supplies the rest. I am looking forward to the new semester and I pray you and your families have a blessed new year!
Feliz septiembre!
Muchas escuelas han reanudado sus actividades y las rutinas familiares están en pleno apogeo con deportes y actividades extracurriculares. Aquí en Santa Juana de Arco hemos tenido un mes de agosto tranquilo y estable y aprovechamos este tiempo como personal para desarrollar nuestras metas de liderazgo. Una realidad importante que llegó a nuestro equipo fue la de la familia, una familia de fe para ser más específicos.
Al observar a nuestras propias familias, vemos alegría y entusiasmo por la fe. Estos sonidos simples y ruidosos alrededor de la parroquia traen una felicidad y un sentido infantil de pertenencia no solo a la familia del hogar, sino a una familia de creyentes en Jesucristo. Por lo que presencié, este lugar que llamamos nuestra parroquia hogar tiene muchas edades y cuando se quedan y hablan entre sí, encontrarán muchos valores fundamentales entre los miembros de su familia parroquial.
Las oportunidades devocionales y de oración están presentes antes, durante y después de la misa. Nuestra capilla de adoración perpetua está abierta para que se encuentre con nuestro Señor en la Eucaristía. Tenemos horas regulares de confesión y educación religiosa para recibir los sacramentos. Se tienen en cuenta todas las edades y mi esperanza es que, sin importar en qué etapa de la vida se encuentre, encuentre su parroquia de origen como un lugar de sanación, renovación y crecimiento.
Al reunirnos, recuerden difundir alegría y misericordia entre nuestros invitados y visitantes. Preséntese cuando vea una cara nueva. Tiene mucho que ofrecer en su corazón humilde y creyente. Es el Señor quien provee el resto. ¡Espero con ansias el nuevo semestre y rezo para que ustedes y sus familias tengan un año nuevo bendecido!
BACK TO LIST