4th Week of Advent

12-19-2021Pastor's LetterFr. Oliver Vietor

Good Morning to All,

Now as we come to the final Sunday of Advent, we know that we are close to the great celebration of the coming of our Lord. This is the whole theme of Advent, His coming, and so we watch and wait and prepare. Now He is almost here. If there is anything left to do, now is the time to get it done quickly. But then we simply remain in watching and waiting and great expectation.

I remember standing watch on many sailboats and Navy ships in earlier days. Sometimes there was nothing to do except watch, but, of course, that was really the whole point. We were to look out for other boats or ships or possibly any emergency aboard our own vessel. So we would peer out into the darkness, perhaps see the stars overhead, looking for the small light of anything else that was out there, just watching. One thing I distinctly remember is the feeling one had on the watch closest to dawn. Before dawn began, that was the darkest, coldest part of the night. You would feel like the night would never end. But then there would be a little lightening in the east; the sky would just start to change color. Dawn was coming. But the point is that the hardest part of the night was just before the dawn.

Here we are watching and waiting for Christmas. It is supposed to be joyful and wonderful. But it is also that part of the night just before the dawn. Some feel it more than others. Some of us are suffering, be it with sickness, or hunger, or homelessness, or loss, or loneliness, or anything else. Let us reach out as we can to help those who are suffering. Especially, let us share the message that the night is almost past, the dawn is close. Christ the light is coming into the world. God’s love is about to shed forth, golden and warm.

Buenas dias,

Ahora que llegamos al último domingo de Adviento, sabemos que estamos cerca de la gran celebración de la venida de nuestro Señor. Este es todo el tema del Adviento, su venida, y por eso velamos, esperamos y nos preparamos. Ahora, casi está aquí. Si queda algo por hacer, ahora es el momento de hacerlo rápidamente. Pero luego simplemente nos quedamos mirando y esperando y con gran expectativa.

Recuerdo haber estado de guardia en muchos veleros y barcos de la Armada en días anteriores. A veces, no había nada que hacer excepto mirar, pero, por supuesto, ese era realmente el punto. Debíamos estar atentos a otros barcos o posiblemente a cualquier emergencia a bordo de nuestro propio barco. Así que mirábamos hacia la oscuridad, tal vez veíamos las estrellas en lo alto, buscando la pequeña luz de cualquier otra cosa que estuviera ahí afuera, simplemente mirando. Una cosa que recuerdo claramente es la sensación que uno tenía en el vigilancia más cerca del amanecer. Antes de que comenzara el amanecer, esa era la parte más oscura y fría de la noche. Sentirías que la noche nunca terminaría. Pero luego habría un pequeño luz en el este; el cielo empezaría a cambiar de color. Se acercaba el amanecer. Pero el caso es que la parte más dura de la noche fue justo antes del amanecer.

Aquí estamos, mirando y esperando la Navidad. Se supone que es alegre y maravilloso. Pero también es esa parte de la noche antes del amanecer. Algunos lo sienten más que otros. Algunos de nosotros estamos sufriendo, ya sea por enfermedad, hambre, falta de vivienda, pérdida, soledad o cualquier otra cosa. Extienda la mano lo más que podamos para ayudar a los que sufren. Especialmente, compartamos el mensaje de que la noche casi ha pasado, el amanecer está cerca. Cristo la luz viene al mundo. El amor de Dios está a punto de derramarse, dorado y cálido.

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