Consecration to the Holy Family

12-30-2018Pastor's LetterFr. Don Kline, V.F.

In an effort to strengthen families and revitalize our parish, I would like to invite each family in our parish to consecrate themselves to the Holy Family and to devote themselves to the ideal model of familial love set by Jesus, Mary and Joseph.

To help families live out the joy of Christ, Supreme Chaplain Archbishop William E. Lori has composed a prayer through which families are able come together to consecrate themselves under the protection of the Holy Family. In this prayer, families ask for the aid or intercession of the perfect Son Jesus Christ, Mary our perfect mother, and Joseph who is a model for every father. The Knights of Columbus offer this consecration to help families to grow in holiness and draw closer to the Holy Family.

Preparing for the Consecration to the Holy Family is not a single event. It is choosing a way of life for your family. Through this consecration, each participant is consciously choosing to be a beacon of God's love through his Church. A Consecration to the Holy Family also involves deciding that you are not only dedicating your family to the Holy Family's intercession but also acknowledging that your family is sacred.

The decision to consecrate your family needs to be intentional and a process through which you completely surrender your family to God through the Holy Family. You are accepting the truth that salvation history was changed forever by a family and that through your domestic church, you are called to exemplify their example.

Four suggested steps before Praying the Consecration to the Holy Family:

  1. Discuss the importance of this consecration as a family and why you are doing it.
  2. Each member of your family is strongly encouraged to go to the Sacrament of Confession.
  3. As a family, intentionally choose something to fast from. The fast can be for at least a week. As our physical bodies are drawn to things of the world, it is strongly encouraged that you fast from something that you would normally do or consume. Fasting helps to discipline our minds and hearts to refrain from secular activities and be more focused on God.
  4. Prepare for the commitment you are making. Consecration to the Holy Family is not a single event. You have chosen a way of life for your family. You and your family are consciously choosing to be a beacon of light of God's love through His Church.

Prayer of Consecration

O Lord Jesus, you lived in the home of Mary and Joseph in Nazareth. There you grew in age, wisdom and grace as you prepared to fulfill your mission as our Redeemer. We entrust our family to you. O Blessed Mary, you are the Mother of our Savior. At Nazareth you cared for Jesus and nurtured him in the peace and joy of your home. We entrust our family to you. O Saint Joseph, you provided a secure and loving home for Jesus and Mary, and gave us a model of fatherhood while showing us the dignity of work. We entrust our family to you. Holy Family, we consecrate ourselves and our family to you. May we be completely united in a love that is lasting, faithful and open to the gift of new life. Help us to grow in virtue, to forgive one another from our hearts, and to live in peace all our days. Keep us strong in faith, persevering in prayer, diligent in our work, and generous toward those in need. May our home, O Holy Family, truly become a domestic church where we reflect your example in our daily life. Amen.

Jesus, Mary and Joseph, pray for us!

God bless,
Fr. Don Kline, V.F.

Consagracion a la Santa Familia

Queridos hermanos y hermanas,

En un esfuerzo por fortalecer a las familias y revitalizar nuestra parroquia, me gustaría invitar a cada familia de nuestra parroquia a consagrarse a la Sagrada Familia y dedicarse al modelo ideal de amor familiar establecido por Jesús, María y José.

Para ayudar a las familias a vivir la alegría de Cristo, el Capellán Supremo, Arzobispo William E. Lori, ha compuesto una oración a través de cual las familias pueden reunirse para consagrarse bajo la protección de la Sagrada Familia. En esta oración, las familias piden la ayuda o la intercesión del perfecto Hijo Jesucristo, María, nuestra madre perfecta, y José, que es un modelo para todo padre. Los Caballeros de Colón ofrecen esta consagración para ayudar a las familias a crecer en santidad y acercarse a la Sagrada Familia.

Prepararse para la Consagración a la Sagrada Familia no es un evento único. Es elegir una forma de vida para tu familia. A través de esta consagración, cada participante elige conscientemente ser un faro del amor de Dios a través de su Iglesia. Una consagración a la Sagrada Familia también implica decidir que usted no solo está dedicando a su familia a la intercesión de la Sagrada Familia, sino que también reconocer que su familia es sagrada.

La decisión de consagrar a su familia debe ser intencional y un proceso mediante el cual usted entrega a su familia por completo a Dios a través de la Sagrada Familia. Estás aceptando la verdad de que la historia de la salvación fue cambiada para siempre por una familia y que a través de tu iglesia doméstica, estás llamado a ejemplificar su ejemplo.

Cuatro pasos sugeridos antes de orar la consagración a la Sagrada Familia:

  1. Discuta la importancia de esta consagración como familia y por qué lo hace.
  2. Se recomienda encarecidamente a cada miembro de su familia que vaya al Sacramento de Confesión.
  3. Como familia, intencionalmente elija algo para ayunar. El ayuno puede ser de al menos una semana. A medida que nuestros cuerpos físicos se sienten atraídos por las cosas del mundo, se recomienda enfáticamente que ayunen de algo que normalmente haría o consumiría. El ayuno ayuda a disciplinar nuestras mentes y corazones para abstenernos de las actividades seculares y estar más enfocado en Dios.
  4. Prepárese para el compromiso que está haciendo. La consagración a la Sagrada Familia no es un evento único. Has elegido un modo de vida para tu familia. Usted y su familia están eligiendo conscientemente ser un faro de luz del amor de Dios a través de Su Iglesia.

Oración de Consagración

O Señor Jesús, viviste en la casa de María y José en Nazaret. Allí creció en edad, sabiduría y gracia mientras se preparaba para cumplir su misión como nuestro Redentor. Te confiamos nuestra familia. O Santa María, eres la Madre de nuestro Salvador. En Nazaret cuidaste de Jesús y lo cuidaste en la paz y la alegría de tu casa. Te confiamos nuestra familia. O San José, proporcionaste un casa seguro y lleno de amor para Jesús y María, y nos diste un modelo de paternidad mientras nos mostrabas la dignidad del trabajo. Te confiamos nuestra familia. Sagrada Familia, nos consagramos a ti y a nuestra familia. Que estemos completamente unidos en un amor que sea duradero, fiel y abierto al regalo de una nueva vida. Ayúdanos a crecer en virtud, a perdonarnos unos a otros de nuestros corazones y a vivir en paz todos nuestros días. Mantengámonos fuertes en la fe, perseverando en la oración, diligentes en nuestro trabajo y generosos con los necesitados. Que nuestro hogar, Oh Sagrada Familia, se convierta realmente en una iglesia doméstica donde reflejemos su ejemplo en nuestra vida diaria. Amén. Jesús, María y José, ¡Oren por nosotros!

Dios bendiga,
Padre Don Kline, V.F.

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